Muchas familias que llegan justas a fin de mes en España, si es que llegan, ven cómo mes a mes gran parte de sus escasos ingresos se van al pago del alquiler. El precio de alquilar ha aumentado mucho en los últimos años, especialmente en grandes ciudades y enclaves turísticos, pero quienes tienen menos dinero se ven abocados a pagar estas rentas. Les resulta mucho más caro que una hipoteca, pero esta les es a menudo inaccesible. El resultado: un bucle sin salida, en el que el bolsillo se vacía cada vez más.