Antón Chéjov, el gran autor ruso, ha muerto hace seis meses, su viuda Olga Knipper ensaya El jardín de los cerezos. Pero la gran actriz está en crisis, ya no puede 'representar', no puede actuar, dice que es incapaz de sentir. Esta es la situación de la que parte Neva, la obra que acaba de estrenar Jorge Sánchez, uno de los directores más interesantes del llamado nuevo teatro argentino que lleva años interviniendo con escalpelo la dramaturgia de ese país. Ahora, Sánchez tiene nueva arma: la obra escrita en 2006 por el chileno Guillermo Calderón, una obra que sacudió el teatro de su país, primero, y luego el de toda Latinoamérica.