El presidente de Brasil, Lula da Silva, ha intervenido en la Asamblea de la República de Portugal el día en que se celebra el 49 aniversario de la Revolución de los Claveles. Durante el pleno, los diputados portugueses han aplaudido y ovacionado en varias ocasiones al jefe de Estado brasileño, que ha hablado de la importancia de fortalecer las relaciones entre los dos países y ha condenado la invasión de Ucrania. Sin embargo, los miembros del partido de extrema derecha Chega han levantado banderas de Ucrania y carteles que decían "Basta de corrupción" y "El lugar del ladrón está en la cárcel", a la vez que golpeaban la mesa cada vez que el presidente brasileño era aplaudido por el resto del hemiciclo portugués.