Casi dos meses después de las elecciones generales, la derecha aún no ha conseguido formar un nuevo gobierno en Finlandia. Petteri Orpo, líder de la formación conservadora Coalición Nacional y ganador de los comicios por un estrecho margen, había prometido que en el mes de junio habría un nuevo primer ministro. Pero las semanas van pasando, en lo que pronto se convertirán en las negociaciones más largas en la historia reciente del país, y los partidos del bloque de derechas no han encontrado aún una solución para llegar a un acuerdo.