La enconada disputa entre el líder del Grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin, y los altos mandos militares de Rusia estalló este sábado en una rebelión armada en la que los mercenarios tomaron un cuartel militar en una ciudad del sur de Rusia y marcharon a través de cientos de kilómetros hacia Moscú, antes de dar media vuelta después de menos de 24 horas, cuando el Kremlin dijo que había llegado al acuerdo de que Prigozhin se irá a Bielorrusia y se retirarían los cargos en su contra.