Lo que no se muestra no existe, y eso el cine siempre lo ha sabido. Las películas, y Hollywood como máximo productor de ellas, han configurado el imaginario popular. Las cosas son como dice el cine que son. Hay realidades que un espectador no ha conocido y cuyo primer acercamiento es a través de una ficción. Por eso es tan importante la presencia de referentes que ofrezcan un retrato plural, poliédrico y complejo de cada realidad, especialmente sobre las minorías.
Como decía el documental Disclosure en Netflix, el 80% de los ciudadanos de Estados Unidos nunca han conocido a una persona transexual.